Eterno Titín

Un mes después de su retirada, se le echa de menos en los frontones. Tras 22 años como profesional, el pasado día 5 de octubre, Titín III, el mejor delantero de la historia de la pelota,  se despedía de la competición.

En estas semanas hemos podido leer todos los elogios posibles hacia su figura: el más grande, el más veterano, el mejor gancho, el mejor defensor, un gran compañero, el pelotari más espectacular para el aficionado, el más rentable para las empresas… Yo me quedo con dos, el más cercano y el más trabajador. Cercanía y trabajo, pues lo ha dado todo dentro y fuera de los frontones para la afición.

Tirarse al suelo hasta la última pelota; firmar cuantos autógrafos le pidieran… Humildad y entrega, en la que se han visto reflejados tantos y tantos riojanos. En cada triunfo, en cada chapela conseguida, ha lucido con orgullo la bandera de su tierra.

Pero Titín III ha sido querido no solo por la afición de La Rioja, sino por todo aquel aficionado amante del espectáculo. Y es que en ese sentido, el de Tricio ha sido un revolucionario de la pelota: existe un antes y un después en el estilo de jugar a pelota. No le bastaba el triunfo, sino que buscaba levantar del asiento al espectador, apasionar y crear afición.

Y es ése el mejor legado que nos deja, una hornada de decenas de niños y jóvenes pelotaris riojanos que pronto cosecharán grandes triunfos. Se nos va, pero nos queda el maestro. Decimos adiós a un pelotari, pero ha nacido una leyenda. Nos quedamos sin Titín pero siempre nos quedará Augusto Ibáñez.



Deje una respuesta